Quiche Lorraine

   Hoy vamos a preparar una espectacular Quiche Lorraine. Es una especie de tarta salada que tiene su origen en Francia. Os diré, a modo de anécdota, que es la primera receta que apunte en lo que hoy se ha convertido en mi cuaderno de bitácora de mi cocina ;)

   Esta compuesta de una masa de hojaldre, como base, y cuajada en el horno a base de leche, nata y huevos; aparte de esto, se le pueden añadir un montón de variantes de ingredientes: se puede hacer de carne, de verduras, de espinacas, de queso, en fin, de lo que más os guste o con lo que se os ocurra experimentar.

   La que vamos a hacer hoy, la vamos a rellenar de jamón y queso, y le vamos a añadir unos champiñones y un poco de cebolla previamente pochada. ¿Quien se anima?

Ingredientes:

• una lamina de 250 grs de hojaldre, bien de las compradas en el super, bien de la que nos hayamos currado nosotros (que, evidentemente, estará muuuuucho mejor). Si alguien se anima, las medidas de ingredientes las podéis ver aqui, y la manera de elaborarlo... aqui.
• 200 grs de jamón de york
• 250 grs de queso en lonchas (mucho mejor si usáis uno tipo gouda o similar que si le metéis unos "tranchetes". Al menos, que sea un queso de sandwich de barra loncheado
• una bandeja pequeña de champiñones (125 grs - 250 grs)
• una cebolla
• 3 huevos
• 1 vaso de leche (250 ml)
• 1 brik pequeño de nata liquida para cocinar (200 ml)

   Vamos a ello... lo primero de todo, mientras precalentamos el horno a 200º es preparar el molde y el hojaldre. Para ello, estiramos con ayuda de un rodillo la masa, espolvoreando un poco de harina sobre la mesa y el propio rodillo (solo en caso de que el molde no tenga la misma medida que la lámina de hojaldre que hemos comprado -que es muy probable que ya sea así-). Yo suelo usar un molde redondo que es justo la medida de la masa de hojaldre que sulen vender, pero en este caso cojí uno rectangular un poco mas grande (con lo que tambien aumenté un poco las medidas de todo lo que os he puesto en la receta).

   Salpicamos de agua el molde antes de extender el hojaldre sobre él (así evitaremos que se pegue). A continuación, forramos con papel de plata por encima del hojaldre y ponemos sobre él garbanzos (o cualquier otra legumbre) hasta cubrir totalmente. Lo que vamos a hacer aquí es hornear primero el hojaldre, para que cuando echemos la parte liquida sobre él ya esté cocinado (si no fuera así, la base estaría siempre húmeda y se nos quedaría cruda)

   Estos garbanzos ya no los podéis usar para cocerlos, pero si los guardáis en un tarro os pueden servir los mismos para cada vez que hagáis algo con hojaldre. La razón de ponerlos encima es que si no lo hacéis así, el hojaldre de la base crecerá sin dejarnos el hueco central para rellenarlo, así lo evitamos.

   Horneamos durante 20 minutos, sacamos y, con cuidado, retiramos nuestros garbanzos y el papel de plata que los separa del hojaldre que hay bajo él, quedandonos con este aspecto y listo para rellenar...

   Lavamos los champiñones y los ponemos a rehogar un poco, al menos hasta que hayan soltado todo el agua (si los pusiéramos en crudo, se nos encharcaría la quiche. En otra sartén vamos pochando la cebolla. Mientras, vamos partiendo en trozos el jamón y repartiendolo desuniformemente por la base, junto con el queso; una capa de cada hasta que se nos acaben.

   Completamos por encima con los champiñones y la cebolla. Ahora batimos en un bol, la leche, los huevos y la nata, para luego echarlo por encima de nuestra base.


   Metemos al horno 45 minutos, poniéndolo en este momento para que el calor lo de solamente por la parte de abajo. Una vez pasado este tiempo, ya estará hecho, pero si no se nos ha tostado un poco por arriba, le ponemos 5 minutos mas con el gratinador (observandolo siempre no vaya a quemarsenos); debería quedarnos con este aspecto...

   Listo para dejar enfriar antes de desmoldar con cuidado, preferiblemente, dándole la vuelta sobre un plato (tipo tortilla de patata) y rápidamente de nuevo sobre en el que lo vayamos a servir.

   Se puede tomar fría, del tiempo, o pegarla un ligero calenton en el horno antes de consumirla; pero, eso si, mejora la textura si la dejáis reposar tranquilamente y no la servís justo cuando la acabéis de cocinar...

   Que aproveche!!!