miércoles, 14 de agosto de 2013

Falso Risotto en el campo

Perdonad la escasa actividad, pero en estas fechas...

   En fin, hoy vamos a preparar un Risotto, pero no uno normal, sino el de emergencia. Lo hemos hecho estando de Camping por ahí, así que la infraestructura no era la mas adecuada para hacer platos gourmet, con lo que nos hemos tenido que conformar con esto...


   ¿conformar? probadlo, esta riquísimo, y aunque no es un Risotto de verdad, da bastante el pego. La diferencia fundamental es que el auténtico adquiere la cremosidad del arroz a base de irlo preparando muuuuy despacio e incorporando los líquidos poco a poco; aquí esto lo "simulamos" añadiéndole un poco de nata al final.

   Lo que encontré en la nevera:
  • Una cebolla
  • Fiambre de pechuga de pavo
  • 5 o 6 setas shitake deshidratadas
  • el arroz, evidentemente
  • 200ml de nata para cocinar
  • un poco de parmesano para acompañar
  • aceite, sal y pimienta


   Vamos al lío... lo primero vamos pochando la cebolla hasta que esté hecha pero sin que haya cogido color. Mientras tanto, vamos troceando las setas (sin necesidad de haberlas hidratado antes) y el pavo.


   Una vez lista la cebolla, añadimos setas y pavo, rehogamos un poco y ponemos el arroz. Mientras se rehoga también un poco, preparamos un poco de papel de plata que vamos a utilizar luego para tapar la cazuela (lo digo por que sepáis el tamaño que vamos a necesitar). Extendemos un poco de aceite sobre el y "sembramos" con sal y con pimienta. Reservamos.


   Añadimos el agua a nuestro risottillo. El doble en volumen del arroz que hayamos empleado. Ahora es el momento de tapar con el papel de plata, sellando los bordes para que no se escape nada por ahí y haciéndole unos agujeros arriba para que respire un poco.


   El vapor hará que se vaya desprendiendo parte de la sal y la pimienta; lo justo que vaya a necesitar ;) Dejamos cociendo durante unos 10 minutos. Se tiene que haber consumido todo el agua, pero no andéis abriendo cada dos por tres a ver si ya está, porque se nos escapara el vapor y nos quedará duro (así que con prudencia). si necesita un poco mas de tiempo, pues le dejamos, claro.


   Y ya está. Solo nos falta añadirle el "falso" de Risotto, es decir, la nata; removemos un poco y a servir. Una vez en el plato, ponemos parmesano a gusto y mmmmmmmmmm toma Risotto campestre (los de al lado, que se han currado una paella, nos miran estupefactos ;)


3 comentarios:

  1. Mmmmmmm que delicia!!! Y qué original me parece!!! A ver si me animo a probarlo :) Un beso

    ResponderEliminar
  2. ¡Hola! ¿Qué tal?
    Pues me ha parecido muy bueno y muy original. A ver si me animo y lo hago, pero lo del papel de plata me ha dejado bastante sorprendido, no tenía ni idea de esta técnica.
    ¡Besos!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Prueba y me cuentas, la verdad es que coge lo que necesita, ni te quedas corto, ni te pasas

      Eliminar

Web Analytics